Cuantas veces nos encontramos ante la duda de elegir entre más habitaciones de pocos metros o menos habitaciones pero más amplias? En realidad, si la estructura ya está establecida, no hay que dudar en cambiar la distribución si se ganan metros y se limpia visualmente el espacio.

La idea es conseguir una casa que resulte cálida y acogedora, para ello hay que estudiar bien los colores y la iluminación.

Para lograr un orden visual es importante hacer buenos armarios, que no agobien y oculten lo que no queremos que esté a la vista. Los cubrerradiadores ayudan a crear un ambiente más elegante y además actúan como mesas auxiliares.

Cuando se trata de una casa convencional hay que trabajar sobre techos y paredes para darle un aire diferente y dotarla de personalidad, esto lo podemos conseguir con molduras y detalles decorativos.

Una casa debe ser acogedora e intimista, y para lograrlo, la luz es fundamental. Por ello, las lámparas con pantalla que proyectan luz de forma indirecta son las indicadas.

Un mueble del siglo XVIII puede integrarse con otro de diseño si se sabe buscar el sitio adecuado para cada uno, la mezcla de estilos le da mayor personalidad al ambiente.

Una decoración ordenada y limpia, en la que todo aporte tranquilidad y sosiego, es preferible a lo ostentoso, se debe evitar el exceso de muebles.